Nagore Laffage Casasola



Nagore Laffage Casasola tenía 20 años y era estudiante de segundo año de Enfermería, haciendo las prácticas en la Clínica Universitaria de Navarra, en el centro de la capital. Cuando decidió ir a los San Fermínes en 2008 nunca pensó que acabaría de aquella manera.

José Diego Yllanes Vizcaya, de 27 años, era residente de Psiquiatría en la Clínica Universitaria de Navarra.

Era el primer día de los San Fermínes, el 7 de Julio de 2008, de madrugada. Nagore y José Diego nunca se habían encontrado aunque estuvieran en la misma Clínica. Sin embargo se encontraron aquella madrugada en un bar, después de que José Diego le dijera adiós a su novia, la cual que era médico y trabajaba en la misma Clínica Universitaria de Navarra.

Nagore pasaba los últimos con sus amigos y después, sobre las seis de la madrugada, tanto ella como José Diego se fueron juntos, él le dijo que llevaba 36 horas sin dormir, ambos se besaron, acariciaron y se fueron al piso de él, en el barrio de San Juan. Nagore no quería acabar en la cama con él y se negó a tener relaciones sexuales con él. Pero José Diego no hizo caso de sus negaciones. 

Por lo que su respuesta fue una brutal paliza de 38 golpes. Le quitó la ropa con violencia, le dejó los ojos morados y le partió el labio, la apaleó, le causo lesiones internas, la estranguló y al ver que estaba muerta quiso descuartizarla pero lo único que consiguió fue cortarle un dedo. Le robó los anillos y pulseras y más tarde envolvió el cuerpo en tres bolsas de Basora y le puso cinta adhesiva. Luego fue a buscar el coche de su padre y lo metió en el garaje de su edificio, bajo el cuerpo de Nagore y lo puso en el maletero y se dirigió a una zona boscosa en Orondritz a unos 35 kilómetros de Pamplona, y arrojó el cuerpo. Quiso simular que la habían desvalijado ya que dejó el cuerpo vestida con el atuendo de San Fermín y a unos 100 metros dejó la bolsa con las joyas y el cuchillo con la que la asesino. 

Nagore tuvo un momento durante todo el sufrimiento para llamar al 112 y consiguió decir "Estoy muerta, me mata."

José Diego entonces llamó a un amigo a la una de la tarde del día siguiente, día 8 de Julio de 2008, y le dijo "He hecho algo muy malo. Tengo en mi casa a una chica muerta. Necesito que me ayudes a deshacerme del cadáver.", el amigo le dijo que llamase a la Policía y se entregase pero José Diego le contestó que no quería arruinar la vida de su familia.

Una vecina que paseaba a sus perros cuando uno de ellos encontró un bulto y se puso a olfatearlo y la mujer llamó a la Policía. Aunque para aquel momento el amigo de José Diego había avisado de la llamada que había recibido. 

Desde el primer momento según el Psiquiatra en practicas José Diego todo se le había ido de las manos por culpa del alcohol y lo borracho que iba y también de un malentendido, según él, que tuvieron en el ascensor y luego en el piso.

Por desgracia, en el juicio no se le condenó por asesinato, si no por homicidio. Las causas de esta decisión porque confesó el crimen y porque iba borracho. Había varios agravantes pero el jurado popular decidió que solo había el agravante de superioridad física.

El alcohol y la confesión salvaron a José Diego de estar 20 años en la cárcel como pedían tanto la acusación particular como las asociaciones de mujeres y contra la violencia machista. Al final sólo fue condenado a 12 años y 6 meses de cárcel. Por un delito de homicidio con el agravante de superioridad física sobre la víctima.

Tan sólo cuando llevaba 9 años y 8 meses, en 2017, fue puesto en libertad condicional. Pudiendo ejercer en la sanidad privada al salir y en la sanidad pública desde 2020.

Al salir y con la familia de Nagore aún rota de dolor, José Diego Yllanes Vizcay rehízo su vida. Ha conseguido un puesto de psiquiatra en una clínica de salud mental de Madrid. Se encuentra dentro del cuadro de profesionales aunque la condena lo inahabilitaba para ejercer durante los años de condena. Según la clínica no atiende pacientes y sólo colabora ayudando en investigaciones. Cuando se descubrió el nombre y la foto de José Diego en la página de dicha clínica y hubo tanto escándalo la clínica borro todo rastro de José Diego en la web.

Ahora cumplida su condena íntegramente desde hace dos años, él es un hombre libre y que ya puede ejercer en la sanidad pública. Mientras Nagore no pudo seguir su carrera ya que alguien le asestó 38 puñaladas cuando empezaba a vivir su vida, no como el culpable que puede seguir viviendo una vida la cual no debería estar viviendo libre. 

Comentarios

  1. Bueno un caso más de lo barata que resulta la vida de una mujer. Y el trabajo vergonzoso que realizan los juristas en nombre de la justicia. Me abochorna

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